Vuelta de vacaciones: propósitos con Ikigai para que no se queden en el cajón
- Publicado el 02 de Septiembre de 2025
- |
- IKIGAI
- 18

Septiembre huele a libros nuevos, a agenda recién estrenada y a “este año sí que sí”. ¿Te suena? Volvemos de vacaciones con las pilas cargadas, con la piel aún bronceada y la cabeza llena de planes: comer mejor, movernos más, organizarnos, dedicar tiempo a lo que nos hace felices… ¡pero al llegar a la rutina muchas veces todo se nos desinfla!
Hoy quiero proponerte que esta vez lo hagas diferente: que tus propósitos de vuelta de vacaciones no se queden en una lista olvidada en un cajón, sino que se conviertan en pequeños pasos hacia tu Ikigai, ese “para qué” que da sentido a tu vida.
¿Y qué tiene que ver el Ikigai con la vuelta de vacaciones?
El Ikigai es esa unión mágica entre lo que amas, lo que sabes hacer bien, lo que el mundo necesita y lo que puede darte sustento.
En septiembre, cuando volvemos a la rutina, es el momento perfecto para preguntarnos:
¿Estoy dedicando mi tiempo a lo que de verdad me gusta?
¿Cómo puedo alinear mis talentos con mis objetivos diarios?
¿Qué pequeños cambios puedo hacer en mi rutina para sentirme más plena?
Porque no se trata de hacer una lista kilométrica de “deberías” (que solo genera frustración), sino de encontrar microacciones que te acerquen a tu propósito.
Propósitos con alma (y con Ikigai)
En lugar de “hacer más deporte” escribe: quiero mover mi cuerpo de una forma que me haga sonreír.
En lugar de “organizarme mejor” piensa: voy a crear espacios de calma en mi día para no vivir corriendo.
En lugar de “comer sano” prueba: voy a elegir alimentos que me nutran y me hagan sentir ligera.
El truco está en conectar cada propósito con tu Ikigai. Así no serán tareas aburridas, sino parte de tu camino hacia lo que de verdad importa.
Mi propuesta para ti
Haz tu lista de propósitos (pero cortita, 3 máximo).
Pregúntate el para qué: ¿por qué quiero esto? ¿cómo me conecta con mi Ikigai?
Elige un primer paso pequeño y realista. Olvídate del “todo o nada”.
Y, sobre todo, disfruta del proceso. Porque tu Ikigai no es una meta final, es un viaje diario.
Para terminar…
Este septiembre no te castigues con “tengo que”. Regálate un quiero, un “esto me acerca a mí” y un “esto me conecta con lo que vine a hacer aquí”.
Esa es la verdadera magia de vivir en armonía: no acumular listas de deberes, sino alinear tu vida con lo que te hace vibrar.
¿Quieres descubrir tu propio Ikigai y empezar el curso con claridad? Escríbeme y te acompaño a diseñar un plan personalizado para que este año sea realmente TU año.
Si quieres conocer más detalles, contacta conmigo. Puedes hacerlo por teléfono: 649 568 403, por WhatsApp o Telegram: 649 568 403 o por email: info @ fengshuiespacioarmonizado.es.
Sobre el Autor

Sara Reneses
Experta en Feng Shui
Desde pequeña he tenido la “manía” de cambiar los muebles de mi habitación de sitio. Cada vez que los cambia sentía que algo cambiaba en mí... ¿lo has comprobado alguna vez? Ahora con Feng Shui sabrás dónde ubicarte tanto tú, como las estancias y los elementos decorativos correspondientes a cada una de ellas, de la misma manera que puedes saber qué elementos son los que más te benefician.